
Vacunación
La vacunación es fácilmente identificada como indispensable para cualquier propietario de algún perro, pero en realidad ¿qué tanto se sabe acerca del calendario que requieren los perros a lo largo de su vida?
Antes de adentrarnos en el tema, es importante destacar que el calendario de vacunación puede variar de acuerdo a la zona geográfica en la que se encuentra el perro, de las principales enfermedades que se presentan en cada población, edad del animal, marca del material biológico, del tipo de vacuna que se aplique (dobles, triples, cuádruples y hasta séptuples), costumbres del veterinario, etc.
¡No curan!
Es indispensable saber que las vacunas no sirven como tratamiento de enfermedades, un animal enfermo por ningún motivo se deberá vacunar, por ello, antes de cada aplicación, su veterinario deberá realizar un examen físico completo, tanto a cachorros como adultos.
Las vacunas tardan aproximadamente 15 días en tener algún efecto, es por esto que normalmente se aplican dejando tiempo entre cada aplicación.
Calendario de vacunación de cachorros
En el calendario inicial de cachorros, la recomendación es emplear dos y hasta tres aplicaciones de la misma vacuna, para poder considerar que los cachorros quedarán protegidos, teniendo en cuenta que, a pesar de aplicar inclusive varios refuerzos de una misma vacuna, ésta no siempre podrá crear una protección igual en cada perro, ni ciento por ciento total; la respuesta a la enfermedad dependerá de diversos factores como: la calidad del material biológico, el cuidado de este producto por parte de quien las aplica (mantener siempre en refrigeración y sin luz directa), así como la respuesta de cada individuo.
El inicio del calendario de vacunación en cachorros puede ser variable, dependiendo del nivel de anticuerpos que tenga la madre, es decir, si la madre fue vacunada muy cerca del momento de la cruza, lo más probable será que los cachorros adquieran una buena protección, en tal caso, se podrá comenzar la vacunación aproximadamente entre los dos y tres meses; en cambio, si la madre murió en el parto o no fue vacunada en los meses previos, los cachorros podrán comenzar su vacunación al mes y medio de edad, esto lo debe decidir el veterinario dependiendo de éstas y otros condicionantes.
Es mucho más económico prevenir enfermedades que curarlas
Anteriormente se acostumbraba a vacunar a los perros en los primeros meses, posteriormente aplicar la vacuna de rabia cada año y listo. Sin embargo, se ha documentado cada vez más que perros adultos pueden presentar enfermedades como moquillo, parvovirus, leptospira, etc., que son padecimientos que se pueden prevenir vacunando año con año a nuestras mascotas. Esto no sólo por la salud de nuestros perros, sino también de nuestra familia, ya que enfermedades como muchas parasitosis, leptospirosis y rabia se pueden transmitir del perro al humano.
Las enfermedades a incluir en el cuadro básico de vacunación en cachorros son: Parvovirus, Moquillo (Distemper), Adenovirus, Leptospirosis, Coronavirus, Parainfluenza y Rabia
Las enfermedades a incluir en la re-vacunación anual en adultos son:
Parvovirus, Moquillo (Distemper), Adenovirus, Leptospirosis, Parainfluenza y Rabia
Visite al veterinario regularmente
El médico veterinario deberá realizar un examen físico general como parte de la vacunación anual, esto es una buena manera de aproximarnos a los perros y revisar puntos clave para identificar el desarrollo de una enfermedad, formación de sarro dental, problemas de piel, etcétera, sin embargo, no siempre es suficiente, es recomendable realizar chequeos con pruebas de laboratorio por ejemplo, en animales mayores de cuatro años y dependiendo de los resultados realizarlos cada año o dos años, con el fin de diagnosticar enfermedades tales como diabetes, hipotiroidismo, hiperadrenocortisismo, o problemas en hígado o riñón, por mencionar algunos, que de otra forma nos sería imposible diagnosticar en los perros.
En perros predisponentes por ejemplo a displasia de cadera, es importante tomar estudios radiográficos para diagnosticarla, aún cuando el perro no presente signología (evidencia de padecer la enfermedad), ya que se puede “controlar” el desarrollo de este padecimiento, a través de medicamentos y suplementos alimenticios.
Compromiso social
Como parte de la medicina preventiva debemos incluir la esterilización de nuestras mascotas cuando presenten enfermedades hereditarias como diabetes, displasia de cadera, hipotiroidismo, criptorquidismo (retención de uno o dos testículos en cavidad abdominal), etc., ya que sólo evitando la reproducción de estos ejemplares podremos controlar este tipo de enfermedades.
Fuente: Perros Pura Sangre.